448 Oscaren ametsa. El sueño de Oscar.

Descendiente de pescadores peruanos de Huanchaco. Gente curtida y dura, con unas olas maravillosas. Gente unida que comparte todo aunque no siempre haya gran cosa que compartir. Gente que sale a recoger los frutos de la mar en caballitos de totora bien sea de día o de noche.

Un chaval con el mundo por delante que aunque tenga esa pinta de hawaiiano broncas no para de reir y hacer bromas. Va por tí Oscar. Y por tu familia.

"..mi madre cuenta que de pequeño me metía hasta el pico, y cuando venía una ola me decía patalea y yo pataleaba y la recorría con el cuerpo. Donde terminaba la ola me esperaba mi padre, y se iban turnando."

447 Donostiko longboard.

446 Walking on the moon II.

photos: Saltdrop & Kukurusta.

445 Basoan II. En el bosque II.

Grácias a un regalito analógico muy guapo que me han hecho puedo sacar estas ojo de pez.

444 Basoan. En el bosque.

Entre peli y peli del surfilmfestibal, una escapada al bosque con Mario, Álex y Borja.

443 Daniel.

Erase una vez un gringo llamado Daniel. Tal día como hoy surfeaba en una calita de roca con su nueve pies. Era uno de los pocos lugares donde había olas, alrededor de medio metrito y el sol convertía en joyas las rocas que se veían en la remontada al tocarlas con su luz..
..explicó a dos chicos que allá por septiembre de 1977 y con tan solo 18 años fue a Mundaka para pasar un día y se quedó un mes. Aquél mes fue inolvidable para él y un par de amigos. Muy poca gente surfeaba Mundaka entonces y ellos alucinaron con el lugar y con la ola. Él deseaba quedarse a vivir allí y casarse con alguna lugareña, reía al explicarlo. En una de esas sesiones de septiembre, entraba una barca de arrantzales, pescadores de Mundaka. Volcaron con los golpes de las olas, y ellos que estaban surfeando allí, les rescataron. Los arrantzales no sabían nadar. Desde entonces se convirtieron en héroes para el pueblo y a donde quiera que fueran, no les permitían pagar ni un solo pintxo.

442 Udaren olatuak. Olas de verano.

Y alguna chica más en el agua. Hoy 3. Animo neskak! Que hacéis falta para poner un poco de calma en el pico.

441 Walking on the moon.

Gràcies Saltdrop per aquestes maravilloses imatges i per deixarme fer les meves primeres fotos amb una carcasa submarina.

440 Anselmo.

"..y he caminado patrás palante cruzando las piernas, nunca antes me pareció tan fácil en un long, qué maravilla."

photos: kukurusta.

Hoy iba a surfear, aunque no hubiera olas. Había decidido que iba a surfear. Así que he cogido mi tabla más gorda, la single fin y me he ido para Gros. He llegado y había dos palmos, si, dos. Me he metido sin el leash y me he encontrado a Anselmo, con el que nunca antes había hablado aunque nos habíamos cruzado. Él iba con un tablón Takayama de Tito hecho de epoxy. También ha entrado Jontxu del Warung, con un long viejo y amarillo pero aún muy eficaz. Anselmo y yo nos hemos puesto a charlar y me ha preguntado -¿Quieres probarlo? Un resorte ha hecho brillar mis dientes y sonreir. -¿Cómo no? (Tito no sufras que lo he tratado con cariño).

He pillado varias olas o microolas con esa maravilla y he caminado patrás palante cruzando las piernas, nunca antes me pareció tan fácil en un long, qué maravilla. Anselmo ha rascado lo que ha podido con la single fin, mucho menos agradecida en miniolas. Sin abusar le he devuelto el long tras unas olitas. Vamos, que me has alegrado el día Anselmo! Eskerrik asko!

439 Denbora gailua. La máquina del tiempo.

photos: Kukurusta.

"..y fantaseo con surfear esas olas vírgenes abriendo el camino del surf como algo único. Olas sin dueños, sin locales, sin dibujar ni interpretar, sin surfear; esperando unas quillas para ser surcadas, unos cantos que las acaricien, unos dedos que peinen sus paredes."



Durante la segunda guerra mundial el ejército alemán levantó 12.000 búnkers desde Noruega hasta el Bidasoa para proteger el frente atlántico de la invasión aliada. Cuesta trabajo imaginar una ola como La Piste, rompiendo perfecta y majestuosa, completamente vacía frente la construcción de esas moles de cemento asentadas en la arena de Capbreton junto a los soldados alemanes deseosos de dominar el mundo. Los trabajos de los búnkers en las costa vasco-francesa comenzaron en 1941 pero fue en el '42 cuando alcanzaron su máxima intensidad. Fueron construidos por prisioneros rusos en régimen de trabajos forzados y trabajadores asalariados franceses. La retirada se produjo el 21 de agosto de 1944, dos meses después del desembarco aliado en Normandía.

El surf en Europa no fue introducido hasta el '59 por lo que era imposible que nadie pensara en lanzarse allí con una tabla. Hoy día pasamos por allí apenas sin reparar en ellos, como parte natural de ese escenario. Los niños juegan en ellos. Son dibujados por grafitis. Me imagino por un momento teletransportado con mis amigos y amigas a una época sin guerras mundiales, anterior a la introducción del surf en Europa y fantaseo con surfear esas olas vírgenes abriendo el camino del surf como algo único. Olas sin dueños, sin locales, sin dibujar ni interpretar, sin surfear; esperando unas quillas para ser surcadas, unos cantos que las acaricien, unos dedos que peinen sus paredes.



No en vano, esos búnkers nos recuerdan la locura humana, el odio, el cual puede nacer por un conflicto tan estúpido como la propiedad de una ola. Es bueno que sigan allí como una lección; una lección que en Europa de momento terminó hace solo unas décadas, ayer; pero que en el mundo sigue latente en forma de numerosos conflictos y guerras absurdas, hoy; Las guerras del dinero, el petróleo, el coltán o las drogas. Y doy gracias por poder coger cada mañana una tabla de surf en vez de un fusil.