Egun on kukuoyentes de esta pequeña emisora imaginaria. Pienso
que algo debe de ir mal cuando ocurre que estamos en el agua y miramos
sobre el hombro y observamos el acantilado, playa, rocas. Un grupo de
surfistas preparándose para entrar al agua. Nos entristece. O aún peor,
nos da rabia. Nos volvemos hoscos. Gruñimos.
El 30 de octubre de 2011, con el nacimiento de
Danica Mae Camacho en
Mani,
Filipinas se alcanzó la cifra de 7 mil millones de habitantes en la tierra.
La
población mundial
ha pasado de los casi 1.000 millones en el año 1800 a más de 6.000
millones en el año 2000 y unos 7.000 millones a finales de 2011. La alimentación, la generalización de la higiene, la sanidad, la difusión de medicamentos y en general el desarrollo de la tecnología han sido decisivos para el fuerte crecimiento (fuente: wikipedia).
Escuchando a
Joaquín Araújo
por la radio hace unos días veo que las sensaciones que traía de mi
reciente viaje son ciertas. Escuchando a este experto ecologista y
viendo los datos que os he mostrado un párrafo más arriba, me quedo con
la boca abierta. Es decir, en tan solo 11 años, hemos pasado a ser 1000
millones más de personas en el mundo.
Estamos demasiados. Y los recursos son insuficientes y mal
repartidos. Mis sensaciones me transmiten que no formamos un número
equilibrado con nuestro entorno. Y eso que Europa no está precisamente a
la cabeza del crecimiento demográfico. Mirando al agua, el alto número
de surfistas y la actitud que se percibe es un indicador más. Sin tener
en cuenta los años de cultura de surf comparado con otros lugares que
podría, aunque no siempre, mostrar actitudes diferentes.
Volviendo a los datos, casa, Donostia San-Sebastián. Una
población de 185.510 habitantes en 2010 y una densidad de 3044
habitantes por kilómetro cuadrado. Sin tener en cuenta el área
metropolitana y los surfers que provienen de la misma y acuden a Gros.
Con el imparable crecimiento de surfistas anual la fórmula olas x
surfista no sale. Hay muchos más surfers que olas por serie. Y sin tener en cuenta las olas que abren.
En el año 2000 según vagas estimaciones de asociaciones
de la industria del surf y asociaciones norteamericanas y australianas
se calculaba que el número de surfers en el mundo podría ir desde 5
millones a 23 millones. La precisión brilla por su ausencia.Sin embargo,
el crecimiento del número de surfers es indudablemente ascendente y sin
posibilidad de remitir.
Pero es de cajón. Demasiada gente, menos recursos, mayor competición,
peor calidad de vida, más contaminación, más castigo para el planeta = mal rollo chungo y de lo peor ¿Soluciones? ¿Control de natalidad por ley
como en China? No. Esto llevó a situaciones dramáticas como el
abandono de bebés del sexo femenino, saturación de los orfanatos, etc.
No puedes obligar a la gente a no tener hijos, es inhumano. Puedes educarles. Puedes tener un hijo en vez de 5. Puedes adoptar..Los expertos hablan del estado de emergencia del planeta ante nuestra forma (humanos y sus leyes)
de actuar. Y solamente voy a comentar por encima el daño que hacen las religiones
que se oponen al uso de preservativos y otros métodos anticonceptivos en
poblaciones que no tienen recursos. Lo cual es una verdadera vergüenza. Y sin hablar del SIDA claro.
Yo no soy un experto. No sé cual es la mejor solución.
Pero en el último año he tenido muchísimas sesiones con poca gente en el
agua. Donde la gente recordaba porqué entraban al agua. Para
divertirse. Para reir. Para saludar nada más entrar y charlar entre
series. Para conectarse con el océano. Para cuidarlo. Para salir más
relajado y ser mejor persona. Incluso para hacer un nuevo amigo. He
conocido algunas comunidades equilibradas.
Y ahora que he
llegado a casa, no siempre, pero a menudo todo es al revés.Un piko
solitario es motivo de alegría. De darse prisa antes de que llegue
nadie, de cogerlo todo para mi. A fin de cuentas, de egoísmo. A veces
ir a surfear es como ir a la guerra. Un juego de fuerza y rabia. ¡Sales
peor del agua!
Rara vez se saluda la gente. Muy pocas sonrisas. Y vuelvo a Gros.
Donde la gente en general me conoce. Donde no soy un local de los más
antigüos ni mucho menos pero estos me reconocen y reconocen mi "derecho"
a surfear en el piko. Lo cual no quita que sigas teniendo que esperar
tu ola y estar muy atento para pillar tu ola. Derecho que por otra parte
me ha costado años de movidas, de caras de póker, disgustos,
insistencia y saber esperar y esperar.
Y veo a la gente
que viene nueva o de fuera con intención de surfear. Y veo las broncas
que se comen. Y claro, reman las olas a esos locales antigüos. Y estos
se rebelan y gritan y protestan y saltan olas y desalojan el piko
intimidando. Y eso tampoco es. Una cosa es decir las cosas, explicar,
incluso con firmeza, educar. Pero en una playa tan urbana y con tanta
gente alrededor la situación no deja de ser surrealista. Entendiendo
parte de los dos lados. Descarto conductas abusivas y mafiosas.
Y por una parte me veo tentado de ejercer mi "derecho de local
real de una playa urbana con demasiada gente donde rara vez abren bien
las olas" y por otra me identifico con ese chaval que justo se acaba de
pasar de la raya con el que no debía y pilla cacho.
Y
todo esto es un lio que no se a donde me lleva, pero que no nos lleva a
nada bueno si seguimos así. Más escuelas, más y más gente en el agua. Y
nuestras olas dan para lo que dan. Y como andamos todos medio locos, más
la presión social que hay en este momento..o hacemos un ejercicio
interior todos nosotros de tolerarnos, de empatía, respeto y de
identificarnos con esa persona que está a nuestro lado que tiene más en
común contigo de lo que piensas..o mal vamos.
Que conste
que estas reflexiones, por si había alguna duda, no pretenden mostrarme
como a un "iluminado" que intenta adoctrinar. Son cosas que me
preocupan, y que escribiéndolas me ayudan a concienciarme a mí, el
primero, con mis defectos y mis días malos como todo el mundo. Y si
además estáis de acuerdo conmigo y entre todos conseguimos que nuestro
entorno sea un poco más luminoso, iremos poco a poco mejor, ¿o no?
Y no es solo cosa de los surfistas y sus movidas, es algo que va adjunto al comportamiento humano.
Ondo ibili kukureaders.