El título de la entrada está relacionado con los búnkers de algunas de las fotografías.
Utilizo este espacio que es Kukurustan como un punto de experimentación; actualizo cuando creo que hay alguna fotografía digna de publicar, algo sobre lo que escribir o simplemente para compartir unas olas con vosotros.
Ultimamente el surf ha sido generoso conmigo. Gracias a Matxu pude poner otra chincheta en mi mapa mental de olas por surfear ya que surfeé Pikua por primera vez. Mi parte donostiarra me llamaba desde hace muchos años hacia esa ola. Con las indicaciones de mi amigo pude disfrutarla junto a los bramidos de las fosas de dragón que un día Eduardo imaginó y llevó a cabo. Parecía un cuento. Una de las tres o cuatro que pillé nunca la voy a olvidar. Matxu se puso fino también. Además de tener un estilo fino y contundente conoce bien la ola y se nota.
Es una ola a la que tenerle respeto, que entra muy rápida con gran masa de agua y tamaño. El agujero que forma junto al muro del tenis, la barra sumergida a poca profundidad y el escenario de la bahía junto al Peine del Viento la hacen especial y con cierto riesgo. Las fotos las sacó mi amigo Mikel que paseaba por allí. Eskerrik asko Mikel. Estábamos los dos solos junto a un par de kayaks.
También disfruté con Pedro de un día entero de olas en Las Landas, un sitio perfecto para probar la nueva tablita que los responsables de Wetsand me han proporcionado, gracias chicos. La tabla me está dando muy buenas sensaciones y era lo que buscaba.
El resto de días, cuando se puede y el trabajo lo permite lo dedico a explorar y buscar la opción más lógica en el mapa y a poder ser la menos superpoblada. Unos u otros, los amigos, todos apasionados a su manera, dan su visión de las olas. Al anochecer, hacer un fuego en las rocas de una cala con unas pocas provisiones es la mejor manera de comentar la sesión.
Ondo ibili kukureaders.