Arratsalde on, buenas tardes kukuoyentes de esta emisora imaginaria.
Recientemente se han marchado tres personas. Tres personas a las que no conocía personalmente pero que eran personas muy importantes para gente de mi círculo.
Por un lado Iker, al que animábamos desde este txoko digital hace tan solo unos meses, quien murió en la pelea siendo muy joven y por el otro las madres de Ramón y Jon Haitz, también recientemente fallecidas.
El pasado viernes tuve el honor de asistir a un funeral en el agua siendo el homenaje más bello al que he asistido nunca, con sol, agua, flores, compañerismo entre la gente de La Mar y energía positiva dentro de la lógica tristeza.
Yo no se cómo funciona esto pero, o crees que todo es fruto del azar y la casualidad o crees que existe cierto orden, llámalo como quieras, dios, vida... Personalmente intuyo que si que hay un orden de las cosas y los seres vivos. Yo le llamo vida, dándole gracias por cada sencillo día que me regala. Algo mucho más allá de las doctrinas chantajistas del miedo de ciertas religiones que quieren tener a la gente controlada, algo más puro y equilibrado, con sentido donde todo encaja. Aunque muchas veces no podamos comprender.
Creo que aunque dejemos aquí el traje (cuerpo), y hay que devolverlo bien curtido y mojado, seguimos viajando de alguna manera.
Entre el nacimiento y nuestra partida hay muchas oportunidades para aprender y mejorar, de bajar nuestros humos y escuchar, de echar una mano y mejorar tanto nosotros como a nuestro entorno, o como mínimo, no empeorarlo.
Esta entrada es por los que se han ido y por las personas que se han quedado y que les recuerdan. Porque de alguna manera, estas muestras de afecto de todas estas personas les deben de llegar.
Ondo ibili kukureaders! Que estéis bien kukureaders!
