La ola de mi vida. |
25.8.11
Egun on kukuoyentes de esta emisora imaginaria.
Hasta el ultimo momento no supe si podria colarme en el Ferry de mercancias. Habia hablado con el capitan, un chico de mi edad y me dijo que lo intentaria, que habia una inspeccion muy dura y no habia mas billetes para ese dia. Finalmente entre. Con las tablas apretadas en la funda de una (habia aligerado peso en Papeete; deje toda la ropa de invierno, neopreno 4/3 etc en la funda grande en ls pension).
Todos eran polinesios excepto una pareja de franceses que iban a Bora Bora. Me hice colega del cocinero y me dejo quedarme en el comedor. El unico lugar del viejo ferry donde habia asientos. Un suave vaiven me adormecio. Mas tarde sali a cubierta. La mar estaba tranquila y el cielo lleno de estrellas.
Tras muchas horas de navegar, aparecio la isla. Me despedi de los chavales polinesios que iban conmigo en el comedor. Y de las cucarachas que viajaban con nosotros.
Baje en la calle principal, la unica. Y me indicaron que la pension estaba a 50 metros. Debido a un malentendido no me esperaban y los unicos huespedes, una pareja de franceses cincuentones no me abrieron por miedo a que fuera un marinero borracho. Asi pues, tras llamar insistentemente y no recibir respuesta decidi pasar la noche en la terraza del pequenyo restaurante de la pension. Eran las 3 de la madrugada.
Use la funda de las tablas y ate las bolsas con los inventos. Dos sillas y las tablas sobre mi hicieron de techo.
A las 6 de la manyana ya habia mucho movimiento pero la puerta de la pension no se abrio. Levante la vista y me quede con la boca abierta. Las montanyas de la isla caian repletas de arboles y palmeras hacia la laguna, un acuario con el agua mas transparente que he visto jamas en cualquier mar. Al fondo peces de colores y erizos con largas puas. Tras esta, a varios cientos de metros, el reef; y una izquierda perfecta rompiendo tubera sin rastro de viento.
El precio del paraiso.
A los polinesios no les gustan los franceses. Quieren la independencia. La acaparacion de la riqueza de las islas y muy serios errores como las pruebas nucleares entre 1960 y 7990 (193 bombas atomicas fueron detonadas)avaladas por los ingleses y norteamericanos no ayudan a la convivencia.
Por su parte el gobierno frances alega la introduccion de la vida moderna, la tecnologia, el transporte entre islas, comunicaciones, etc..argumentos que no convencen a los polinesios independentistas, con un 60% de los votos en Tahiti en las pasadas elecciones.
Hay tension en el aire. Y racismo en ambas direcciones. Si eres blanco no te miran igual. Se rebaja la tension al enterarse de que no eres frances. Si eres surfista, todo esto no ayuda.
El localismo aqui es algo muy serio. Esta isla tiene olas increibles. No hay escuelas de surf ni tampoco surf shops. Y muchos viajeros pagaron el precio de surfear sus olas con sus tablas, robadas por los locales antes de marchar.
Ayer no surfee. Nadie vio que habia venido con dos tablas. Bucee en la laguna y me dedique a patear un cuarto de la isla de manera extremadamente tranquila y respetuosa. Salude y di las gracias en Maohi, su lengua (Ia orana, buenos dias, Maruuru, gracias).
Al regresar la mar habia bajado asi que descarte el surf. Entrene un poco, cene y me fui pronto a la cama. No me habia dado cuenta, pero estaba agotado. No me mola nada esta combinacion colonialismo-racismo. Creo que todos deberiamos aprender a vivir juntos. Pero claro estan las injusticias, el odio.. y sin una vision de dialogo y de reparar y ceder no se puede llegar a una solucion. Y esto lo podemos aplicar en casa.
La sesion.
Me he despertado con el gallo de las 7 (habia uno a las 2, otro a las 3...). He ido al super, enorme para una isla tan pequenya. Supongo que sirve de abastecimiento a navegantes en ruta que hacen escala para otras islas. He desayunado y un fuerte viento y el anuncio de un gran swell me han hecho dudar si atacar o no a uno de los picos.
He salido al muelle con un libro a ver la gente pasar. Sin llegar a sentarme ha llegado un australiano con nombre hawaiiano, Kokee. Me ha preguntado si era surfer y si era bueno. Le he dicho que del monton, jaja. Me ha dicho que estaba grande, que era bodysurfer pero que por las corrientes no queria ir solo. Le he contestado que preferia ir poco a poco...que no queria entrar a saco el primer dia..Grande y Polinesia es algo que debes pensar dos veces. Le he preguntado que como de grande y me ha indicado metro y medio. Le he dicho, sabes que? Vamos. Ok.
Quillas y parafina. Lycra. Botines (al final no los he usado). He subido a su pequenyo bote de aluminio de unos 4 metros de eslora, motor de 15 cv.
-No quiero ir solo! Si la corriente es muy fuerte quiero alguien que me rescate. Ya me paso una vez!
Con una media sonrisa en mi cara hemos cruzado la laguna (una remada muy larga). Kooke, con una kupela (barriga) muy maja me ha pedido que echara el ancla. Y ahi estaba ella: una derecha reina, turquesa enrollandose poderosa con su metro y medio polinesio. Nadie en el agua. Se ve que si no esta glassy no se meten! No es broma!
Este aussie majeton y excelente body surfer me ha explicado lo que debia hacer si tenia que ir al rescate, funcionamiento del motor etc..esta recuperando su forma fisica.
Nos hemos echado al agua. Y os aseguro que el hombre que Kooke ha llevado al piko no era el mismo que ha regresado con el. Algo se ha transormado en mi interior. Estoy impactado. Han sido las olas mas poderosas que he surfeado en mi vida. Posiblemente tambien las mas peligrosas. Una mezcla de adrenalina, miedo, superacion y alegria ha bombeado por mis venas durante casi dos horas.
Surfear ha sido cuestion de posicionamiento (muy valiosos los consejos de mi nuevo amigo, sin ellos el aprendizaje habria sido muy duro), precision en el take off (con esos labios no quieres fallar) y basicamente, de huevos. Las pequenyas no te llevan asi que o te tiras o te tiras.
No he surfeado mal, incluso he podido realizar algunos cut backs. He tenido un wipe out pero gracias no he tocado el reef. Mas que contento con solo correr esas olas. Regresar al pico ha sido duro. La espuma mas pequenya tiene una fuerza brutal, turbulencias. Estruendo, series mas grandes que antes..2 metros ya.
No necesitas bombear, la velocidad que te da el take off es impresionante. Cuando haces el drop en el sitio exacto lo sientes, parece que te conectas con la ola, CLICK y a correr...velocidad, velocidad, velocidad, tension en la tabla y en tu cuerpo. Limite.
Hemos vuelto a la lancha. Y Kooke ha rodeado el reef para ensenyarme la otra ola cercana, una senyora izquierda. Vacia de gente tambien. Hemos regresado al muelle. Hemos charlado un poco. Me ha confirmado el robo de tablas. Le he dado un millon de gracias. Y le he invitado a tomar una cerceza cuando el quiera. Rapidamente he ido a poner mi tabla fuera de la vista.
En la primera conversacion con este australiano, le he preguntado si podia llevar la camara. Me ha dicho que no. Despues me ha dicho que si lo hubiera permitido seguramente se habria metido en problemas. Le he respondido que nunca revelaria los nombres de los spots.
Hoy ha sido un gran dia.
Ondo ibili kukureaders!
6 comentaris:
Excelente historia. Y ahora en Polinesia!!!
Muy bueno!!!
Los comentarios que hacías sobre la ola de "no hace falta bombear, solo con correrla es suficiente, tensión..." me ha recordado a Bali.
Entrada muy interesante, ánimo y nos vemos en tu siguiente post!
Un saludo desde casa
K jabatos jabito aunq el colegita a petxito esos trontxos muy pero q muy jabato no?+
Un fuerte abrazo y a mantener el secreto. US MAIL!!!!
jabi,cada vez ke leo estos relatos tan intensos me keda el cuerpo en tension como si estuviera en esas ondas pero sin ondas,no se,una sensacion rara,de emocion,admiracion....bueno no me enrollo mas.os meus parabens e unha aperta moi longa.besarkada bat.koko
Eskerrik asko a todos. Un abrazo! besarkada bat!
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