Arratsalde on kukuoyentes de esta emisora imaginaria.
Hace exactamente un año regresaba de mi vuelta al mundo que me llevó 359 días. La entrada 750 fue la primera (CLICK) hasta la 934 (CLICK) que fue la última.
Así pues, en este aniversario, me apetecía hacer una reflexión. Quizás lanzar una bengala, no de socorro sino de ilusión, que es la que acompaña a las ideas. Una luz en medio de tiempos difíciles.
Recientemente he visitado la cueva del Monte del Castillo en Cantabria. Tras esa pequeña puerta verde metálica, tras la cual la temperatura baja diez grados de golpe en contraste con el exterior, me encontré clavado frente a una mano pintada en negativo en una de las paredes de roca.
Me había quedado el último del grupo, casi resistiéndome a salir tan pronto de allí, ralentizando a posta mis pasos. Quizás algún visitante importante puede permitirse estar allí a solas un rato, seguramente algún trabajador o arqueólogo que velan por la importancia de esas pinturas rupestres que dejaron nuestros antepasados.
Aquella mano en concreto, de las 60 que hay en la cueva, además de bisontes, urus, etc..había sido pintada hace 40.000 años.
Yo tengo 34 años y he vivido ya más de un tercio de mi vida. En aquella época tendría suerte de aún seguir con vida. Con todo lo que implica vivir, estoy muy agradecido por lo vivido y sigo pensando que cada día que sigo viviendo es un regalo. Una oportunidad. Para vivir, hacer, deshacer, corregir y arriesgar.
Soy un humano más que ama y quiere ser amado, que lucha contra sus limitaciones para superarse a si mismo. Para aprender en esta interminable clase que es esta vida. Igual que vosotros. Así que aprovechad el tiempo que tenéis que este pasa rápido. Si tenéis sueños, mi sencillo consejo, es que vayáis a por ellos, eso si, sin perjudicar a nadie ni a nada.
Ondo ibili kukureaders! buen viaje!
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