Egun on kukuoyentes de esta emisora imaginaria. Hoy os dejo un texto que llevaba tiempo rondándome y me he decidido a escribir. Es un reflejo de ver lo que está sucediendo a mi alrededor.
Ondo ibili kukureaders.
Un tamañero es aquél que siente que el sufrimiento de
prepararse para olas muy grandes física, mental, emocional y espiritualmente
exponiéndose a sus golpes e incluso a morir ahogado merece la pena. Por el
desafío y el placer que le aporta. Por buscar otra forma de conectar con el
Oceáno.
Sin embargo ahora hay en nuestras vidas un maretón
constante. En el que a nadie se nos han preguntado si queríamos surfearlo o si
estábamos preparados. Por sorpresa, un tsunami ha arrasado nuestra sociedad dejando
solamente un paisaje laboral y económico desolador con olas constantes de más
de cuatro metros.
Jubilados, adultos y jóvenes nos hemos encontrado de
improviso tratando de remar en mitad de la tormenta como nunca habíamos hecho
antes. Ahora todos somos tamañeros.
Sobre una tabla de más de ocho pies se encuentra remando una
chica con cuatro años de estudios universitarios. Con más de diez años de
experiencia en su sector, habla varios idiomas, tiene carnet de conducir,
conocimiento de haber viajado por el mundo, buena presencia, es una persona
sana, educada y con ganas de trabajar.
Mantiene la cabeza alta pero no puede distinguir donde está
el piko y no sabe qué ola tiene que coger. La triste verdad es que no hay ola
que coger. Excepto una que le lleva al extranjero.
Envía una media de diez C.V’s
diarios. Entrega muchos de ellos en mano. Se apunta a cuatro ETT’s
(empresas de trabajo temporal) de su ciudad. Hace contactos en linkedin y se
apunta a portales de ofertas de trabajo.
No le llaman ni siquiera para descargar un camión o para servir en un
restaurante o bar. Y está dispuesta a trabajar de lo que haga falta, no se le caen los anillos. Sabe distinguir un
trabajo digno aunque sea humilde.
Sigue enviando curriculums para un trabajo que no existe. Y
así es como nos quieren. Quieren que sigamos enviando c.v’s
por internet con nuestros teléfonos móviles que sirven para muchas cosas pero
especialmente para tenernos entretenidos y estudiados comercialmente, entre
otras cosas localizados por GPS. Aislados.
A un hombre de cincuenta y cinco años le han despedido. Si
quiere cobrar la jubilación debe pagar de su bolsillo la cotización pero como
no tiene le están ayudando sus padres octogenarios. Ha roto el invento y su tabla se aleja. No
sabe cómo hará para volver a la playa.
Un matrimonio con dos hijos se ha quedado sin trabajo y les
han desahuciado. Ya llevan dos olas de serie debajo del agua dando vueltas
deseando salir a respirar.
Lo peor de esta tormenta, lo más frustrante es que no es
natural. Ha sido provocada. Desde una maquinaria avariciosa e inhumana.
Así nos quieren, casi ahogados. Con lo mínimo para
sobrevivir sin que protestemos demasiado.
Han destruido toda la sociedad excepto el sistema de
banqueros y políticos, que son cómplices. Nos quieren discutiendo entre
nosotros sobre si este gobierno debe de caer para dar paso a los que estaban
antes y viceversa una y otra vez cada cuatro años.
El banco azul con el partido azul, el banco rojo con el
partido rojo. Todos cómplices de atraco, banqueros y políticos, ladrones. Hay
que deconstruir esa parte de la sociedad también de una manera no violenta,
para volver a construirla de una manera justa.
Debemos tener capacidad crítica, no ser reaccionarios sino
revolucionarios con cabeza. Con debate real no propagandístico que perdure. Con
construcción, con sistemas, con nuevas leyes que protejan a los ciudadanos, con
educación.
Que esté prohibido que un banco o una caja con un solo click
de ratón cobre una comisión que no es transparente porque la mayoría de la
gente no se entera de esa acción. Porque una sola sucursal con ese solo click
cobra 250.000 euros por una comisión de una tarjeta de crédito por ejemplo.
Este sistema es inhumano. Muchos no sobrevivirán a este
maretón artificial. Los sistemas de hipotecas y vivienda. Los recortes
sanitarios y en la educación. Todo lo que se han llevado de un plumazo en 5
años a las anteriores generaciones les costó décadas de muchísimo trabajo
construirlo.
Hay que cambiar esto. Con construcción. No votando a los
mismos de siempre, rojos o azules ni a los que quieren ser como ellos. Sin
grandes egos ni protagonismos. No sirve una gran pataleta un día y olvidarnos
al día siguiente.
Que no nos separen las palabras ni los colores, estamos
pasando todos por lo mismo y tenemos que trabajar en conjunto, no enfrentados. Tenemos
que ser críticos y analíticos. Pero sobre todo también creativos, para
encontrar las vías que funcionan y dan bienestar al pueblo y a las comunidades
pasando de ellos y teniendo en cuenta a la naturaleza.
Puede que tengas que salir con la tabla partida, con un
golpe o se te salte un trozo de diente. Pero sal con dignidad, con valores.
Seguramente a estas alturas, de tanto comer series estás mucho más en forma que
antes, más fuerte, con menos miedo.
Que no os ahoguen. Remad fuerte en nuevas direcciones.
Suerte.
3 comentaris:
Buen post. menos mal que siempre nos quedará el surf para tirar para adelante.
Magnífico! Ya es hora de que el pueblo comience a hablar!
Buenísimo post y blog, recién descubierto hoy. Buenas olas!
Gracias por leer Asier. Bienvenido.
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