Antes de ayer por fin pude disfrutar de una preciosa sesión de surfing. Un piko limpio con derechas e izquierdas largas y limpias. A primera vista con rachas de bastante viento, en el agua se calmó. Me alegro de haberme motivado a entrar porque estuvimos muy poquitos. Un saludo a mi amigo Xabi de La Zurriola Surf Eskola que suele estar a la escucha y con el que compartí sesión.
La corriente fue bastante dura. Me obstiné en remontar varias veces cuando habría sido más fácil salir y remontar por la corriente. Esto más el entrenamiento de los pasados días hizo que al final de la sesión mis hombros estuvieran sobrecargados. Así pues ayer volví a pasar de ser surfista a ser testigo y fotógrafo.
Hace unos años en mi ignorancia pensaba que para pegarte tubos había que irse a Indonesia. Que llegabas allá, te bajabas del avión, te metías al agua y te entubabas. Jaja. Cuando fui conociendo olas tuberas más de cerca me di cuenta de lo equivocado que estaba.
¿No querías tubos? Ahí los tienes. Muy bien. Ahora se demuestra quién está en forma y quién tiene el valor para estar dispuesto a comer y a frenar la tabla casi en seco para esperar a la espuma y su tubo para que te envuelva.
Es algo contradictorio porque al tener pocas veces olas que abran y duren, lo que te pide el cuerpo es correr y correr, hacer cut-backs y giros. Si ya has conseguido controlar eso en tu mente hay que añadirle que estás con quince personas más. Esperar tu turno y que no es seguro que esa ola en concreto va a hacer tubo.
Y después la técnica. A mi me ayuda los días de malas olas pegarme largas bajadas en longskate. Agarrando el canto, agachándome y subiendo de nuevo. Poniendo el brazo hacia atrás practicando el "engancharte a la pared". Cuando estoy abajo probar a ir cambiando el peso hacia el nose y luego hacia atrás. Incluso bajar una cuesta junto a una pared de ladrillo para mantener la posición. Lo bueno es que puedes practicarlo todas las veces que quieras y cuando estés en esa ola tan especial estarás más preparado.
Me he pegado algunos buenos pero lo que está claro es que me queda muchísimo para dominar los tubos. Pero es algo que motiva mucho.
Ayer, el mejor tubo que vi se lo llevó Norman Landa, un master barrel de los buenos. Alguien de quién aprender a surfear. No está toda la secuencia pero fue un tubo largo y con muchos detalles. Buscado, con frenada, distribuyendo los pesos, completamente cubierto en un tubo de buen tamaño y con una salida limpia.
Nuestro representante de los weekend warriors Pedro, jugó bien sus olas.
Ondo ibili kukureaders!
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