divendres, d’octubre 17, 2008
324 Gogoeta. Reflexión.
Desde que empecé a surfear hace unos 10 años siempre había aprovechado largos veranos de estudiante, vacaciones de currante o simples madrugones antes de entrar a trabajar.
Siempre corriendo, coincidiendo con la mayoría de personas aficionadas al surf que se veían en las mismas circunstancias que yo. En Donostia en coche, casi siempre el de mi madre, pasaba a buscar a algún colega, casi siempre a los Borjas, Niko o Jaime y para Zarautz ibamos, sinó a Gros, o a Getaria...en algunas ocasiones a Les Cavaliers.
En Barcelona desde mi piso del barrio de Poble Sec en bus, el 157 hasta la Barceloneta; después, el mismo bus de vuelta hasta Colón, metro hasta Plaza Catalunya y Ferrocarril hasta Sarrià hacia el estudio de diseño en el que trabajé durante unos dos años. Siempre con la tabla. La gente te miraba, extrañada. Ellos con las legañas y tu con el salitre y otras sustancias ya en la piel, con ese gusto seco y salado en el paladar. Más adelante con la NSR de 80 c.c. amarilla, aguantando la tabla en un costado para que no saliera volando. Siempre corriendo, siempre con prisas, acudiendo al aviso de la marejada.
En puentes, navidades, etc..de vuelta a casa en autobús metiendo la tabla de estrangis para no tener que facturarla.
Ahora me veo en un descanso voluntario y reflexivo, fuera de los circuitos laborales que rigen la mayoría de las vidas. Levantarte, ducharte, desayunar, ir a trabajar. Trabajar, comer, trabajar y si se puede, un baño. Invierno mal, no hay luz al salir. Gimnasio o piscina para mantenerse en forma. Baños nocturnos en el tenis con maretón. Surf de fin de semana. Montones de gente. Otra semana más.
Las preguntas: ¿se puede volver a esa rutina después de disfrutar de picos practicamente vacíos entre semana? ¿después de re-descubrir las olas de muchas playas con otros ojos que siguen siendo los tuyos? ¿a volver a mirar las olas desde una webcam de algún ordenador de algún estudio lanzando un largo y resignado suspiro? El tiempo dirá.
Ayer comí con un buen amigo en el puerto de Pasajes. Tiene una hipoteca de 1400 euros mensuales. Con los últimos movimientos de la economía global le han incrementado la cuota mensual unos 130 euros. Parece que la felicidad que nos venden consiste en estar cada vez más empufados, atados y comprometidos con un préstamo, una hipoteca. Lo peor es que no veo a la gente feliz. Veo ojeras largas, ansiedad e incertidumbre. Quizás es tiempo de replantearnos toda la movida y preguntarnos qué es la felicidad. ¿Un ladrillo? Propongo un columpio y una barbacoa con una bonita ola al fondo. Y si llueve, ¿qué haremos?
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6 comentaris:
Personalmente creo que la Felicidad reside en disfrutar de algunos momentos. Si hubiera un estado de felicidad como un "nirvana" imagino que al final sería aburrido porque somos así; no nos conformamos con lo que tenemos. Almenos, creo, no deberíamos obsesionarnos y sí tratar de ver y gozar de lo que tenemos delante. A veces la infelicidad no es más que frustración. Creo que es mejor conocerse a uno mismo, saber sus virtudes y sus defectos y vivir acorde a ellos.
Yo ahora mismo me encuentro como tú, en paro; apunto de irme de surfari a Marruecos, quizás a la vuelta unos días en solitario viajando por la vieja Europa en solitario para pensar en cómo encauzar mi vida, cómo llegar a SER o mejor dicho simplemente cómo SER. Yo sólo, sin influencias sin influencias, sin prisas.
Una cosa cada vez tengo más clara; la vida hay que vivirla, no importa si es una vida estándard o bohemia, simplemente sabiendo en que hay momentos que saborear en ambos caminos y siempre hay motivos para sonreir (y para mosquearse por qué no. La vida es también equilibrio). Conozco gente de mi edad con críos, hipotecas, fines de semana...y son tremendamente felices (lo sé porque me consta) y gente que curra 6 meses y viaja otros 6 pillando olas por el mundo y son unos amargados.
Por mi parte, sólo espero que cada uno encuentre su sitio y nunca te arrepientas de nada, porque como dijo el cantante "nunca el tiempo es perdido"
Miquel
Tienes toda la razón, y ahora además la suerte de poder disfrutar del bien más preciado del mundo: el tiempo. Creo que una de las cosas que hace que cada día estemos más estresados, más cansados, más hasta las narices de todo es el poco tiempo que tenemos. Ya no puedes disfrutar de aficiones, hobbies o diversiones (bueno, sí que puedes, pero quitándole horas a tu sueño...) y todo ¿para qué? para dar de comer a unos gorrinos insaciables (bancos, compañías de teléfonos, préstamos de coches, financieras, grandes superficies comerciales, petroleras... y un larguísimo etcétera infinito). Y después de todo ¿qué nos queda a los currantes? ya ni el derecho al pataleo, porque cada mes tenemos que pagar más por las hipotecas, por comer, por todo...
Nos han obligado a vivir una vida que no nos corresponde y todos (o la gran mayoría, entre la que por supuesto me incluyo) hemos aceptado, bajado la cabeza y ni nos hemos dignado a rechistar...
¡Qué lastima...!
Markituzzz
Espera a verme a mi la cara dentro de unas semanas y sabras lo que es la felicidad jejeje.
Un abrazo loco, ya queda menos.
Si llueve? Abrir los paraguas o levantar el portón de atrás del maletero.
Animo!
Kuku!
Todos, o creo que casi todos, nos hemos planteado si la vida que llevamos es la que queremos llevar o la que "nos dejan" vivir... has sido muy valiente en tomar la decisión que has tomado y estoy segura de que esta nueva etapa te va a traer muchas cosas buenas... Un abrazo campeón, y que recorras mucho mundo dejando siempre huella como tu siempre haces! Muaaaaa
ey javi! ya veo que estas disfrutando,yo tb me estoy tomando un tiempo de descanso,me canse d tener 22 años ye star siempre en una oficina y estudiando,o en otro trabajo,la verdad esq se disfruta estar solo en el pico,pero kiera q no tb exo de menos el trabajo,de dar clases,o de discutir con los jefes,pero weno hay que disrfutar que cada cosa tiene algo bueno,y trae buenas experiencias q no olvidaras... a disfrutar!! q cuando seamos viejos...seguiremos disfrutando!!
y si llueve? nos vamos al aguita q alguna ola caera!! un abraso! y aver cuando t vienes a comer un cevichito por casa
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