Tras un rato caminando, para sorpresa de los kukurustos, el bosque se abrió, dando paso a una elevada duna. La ascendieron hasta que esta se quedó plana, y ellos, con la boca abierta; se extendía hasta más allá de lo que la vista de los kukus alcanzaba, salpicada con vegetación muy pequeña que la mantenía fuerte. Ahora estaban por encima del nivel del bosque y podían ver las copas de los árboles como una alfombra basta e impresionante.
La mar estaba cerca, la olían, y la escuchaban rugir por el otro lado de la inmensa duna..las olas rompían furiosas de ser descubiertas en su territorio virgen.
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1 comentari:
aki kokorusto a kukurustan,en otra mision desde la tierra de la civilizacion incivilizada.menudas cariñas teniamos de felicidad en esta foto.esperemos ke la tribu de los kukurustas nos teletransporte en otra mision a un mundo magico como este mui pronto.neno eres un fenomeno.unha aperta pra gaston mimaaaa,monica,ector.bikos koko
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