Siempre me gustó correr. Ir a todo gas. Mi viejo me enseñó a conducir con 16 años en un jeep wrangler por las dunas de Huelva entre pinos, un verano. Me saqué el carnet en US con 17. Volví a Euskadi y tuve que esperar un mes para tener la mayoría de edad para poder hacer la conversión de licencia extranjera a la de aquí.
Hice mucho el cabra por las carreteras. En moto o en coche siempre a toda pastilla. Llegué a pegarle un golpe a el coche de la Ama cuando todavía no tenía ni el carnet. Otra vez lo puse a tres ruedas en una curva, destrocé un neumático haciendo trompos y si nevaba me hacía la carretera arriba y abajo cruzando el coche. Una vez subí al faro de auténtico rallye, rabioso, loco, mi abuelo acababa de morir, cruzando el coche, tirando de freno de mano...Otras en verdaderas carreras cruzando la ciudad entera con los colegas...
...hasta que tuve una limada muy gorda en la que podía haber enviado a un telepizzero al otro barrio, los dos nos saltamos nuestros respectivos semáforos en ámbar. Tuve suerte y él también, no pasó absolutamente nada, no nos tocamos, se apareció la virgen o algo por el estilo; otros, cada día no tienen tanta suerte. Muchos mueren o se abonan a la silla de por vida.
La solución: si te gusta correr, AL CIRCUITO!!!
Os dejo unas fotos de Miguel, Rafa, Borja y Kuku, ayer domingo por la tarde en el circuito de Briscous. Mucho engorile!
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